En casa contamos con aspirinas, jarabes y medicamentos de venta libre, pero a la larga estos van perdiendo efecto o nos generan otros malestares, lo natural es mucho mejor y aunque toma un poquito más de tiempo la curación, esta de los tés o infusiones es totalmente inocua y nos equilibra el organismo por completo.
Así que te ofrecemos una lista con los mejores tés o infusiones que no deberían faltar en una casa, ingredientes ideales para superar diferentes molestias, algunas tan habituales como una indigestión, para lo que tener estos elementos en casa siempre nos resultará muy útil. Así que hablando sobre estas infusiones que no pueden faltar en casa Vamos a ver las 5 más importantes:
Manzanilla: es quizá el té más popular que todos tenemos en casa y qué bueno es eso porque en él contamos con un antiinflamatorio, un remedio para la digestión, para las náuseas y vómitos, todo un tratamiento contra indigestiones. Algo que quizá no todos sabemos es que con una infusión de manzanilla, jugo de limón y canela podemos aclarar de forma natural nuestro cabello y evitar así los químicos que puedan dañarlo.
Té chai: bueno, es quizá uno de los tés más suntuosos que podemos ordenar en cafeterías y lugares de té, ya que la mezcla de las tan aromáticas y cálidas especias que lo crean es exquisito. Cardamomo, clavo, canela, anís estrella, jengibre fresco y té negro son los principales componentes (hay quien usa vainilla y pimienta negra también) y en ellos obtenemos antioxidantes, antinflamatorios, antidiabéticos, una regulación en el metabolismos, un aliado al buen aliento y hasta un afrodisiaco en el cardamomo y la canela.
Té negro: como el té verde es antioxidante y nos ayuda a mantenernos jóvenes, pero además combate la diabetes tipo 2, por lo que podemos tomarlo diariamente como parte de nuestro tratamiento contra esta enfermedad. También es bueno para el corazón y por su contenido de cafeína nos da el efecto de estimulante cerebral y neuronal que el café nos produce ¡genial!
Té de tila: clásico té que recomiendan para controlar la presión, el estrés y como calmante en situaciones que nos agobian o nos hacen temer. Por su efecto relajante podemos usarlo para relajar nuestros músculos cuando padecemos dolores de espalda, en articulaciones o producto de ejercicios o golpes.